El alcalde presenta el proyecto que estará presidido por la escultura «Mariposa efímera», obra del artista Eduardo Martínez
El alcalde de Chiclana, José María Román, ha presentado el proyecto de la escultura ‘Mariposa efímera’, que se ejecutará en la plaza de España con cargo a la subvención que el Ayuntamiento de Chiclana recibe anualmente en su condición de Municipio Turístico, por valor de 240.000 euros. Un proyecto en el que se instalará la escultura en bronce del artista Eduardo Martínez y que supondrá la reordenación de esta céntrica plaza de la ciudad. A este respecto, el regidor chiclanero ha señalado que «vamos a actuar en uno de los puntos más importantes de Chiclana como la Plaza de España, para continuar la transformación del entorno del río Iro”, resaltado que “se trata de una actuación más urbana, agradable y amable, con una escultura y una pequeña fuente, para un mayor disfrute de las personas. Así, culminaremos todo ese espacio de entrada al centro de la ciudad desde el puente de Nuestra Señora de los Remedios”, añadiendo que “el proyecto se encuentra actualmente en licitación y será una realidad a lo largo del próximo año”.
Esta actuación prevé la creación de un gran eje longitudinal vertebrador entre los dos extremos de la plaza, es decir, la zona del puente de Los Remedios y la calle La Fuente, que se ve reforzada por dos zonas verdes, que incluirá nueva vegetación. Además, en el centro de la plaza se ubicará la escultura «Mariposa efímera», así como una lámina de agua que actuará como espejo para la imagen de la mujer, así como una lámina vegetal en diferentes plataformas y apoyados con iluminación especial para cada elemento. Finalmente, alrededor de todo el conjunto se instalarán conjuntos de bancos, que permiten la visibilidad de la imagen, así como generar espacios de reunión social. En cuanto a la escultura, que ha sido donada por Eduardo Martínez a la ciudad de Chiclana a raíz de su exposición «Eternamente efímero», indicar que «Mariposa efímera» representa la imagen de una mujer que avanza, con la mirada baja, contemplando una mariposa que, posada en el extremo de los dedos de sus pies, está a punto de emprender el vuelo. De esta forma, presenta una influencia impresionista notable en su tratamiento formal, lo que añade un elemento de singularidad a la obra.