La Junta no acepta financiar su traslado y aconseja que la intervención sea en Córdoba
T.A/Chiclana
Más de 190.000 firmas digitales no han sido suficientes para que el pequeño Cristian pueda ser operado en Boston. Ha sido la última campaña solidaria lanzada por los padres de este chiclanero, de 8 años de edad, que padece atresia pulmonar, una patología congénita calificada por los expertos como “rara” que consiste en la ausencia de arteria que conecte el corazón con los pulmones.
Sonia Reyes, madre del pequeño, ha llevado a cabo innumerables campañas de recogida de fondos para que Cristian pueda ser operado en un hospital de Boston, en Estados Unidos, «en el que operan a un niño con este problema cada dos semanas, mientras que en España ocurre cada cinco años» asegura Sonia. Este traslado conllevaría un desembolso de 60.000 euros, más los gastos del viaje y estancia, lo que les ha llevado incluso a poner su piso en venta para conseguir liquidez.
De ahí la recogida de firmas con las que solicitaban a la Junta que sufragara los gastos del traslado y la operación, al igual que ha hecho el Gobierno de Aragón con una menor de esta comunidad autónoma. A pesar de haber entregado las firmas digitales a la Junta y mantener un encuentro con un responsable de la Consejería de Salud, desde la Junta insisten en que la operación se puede llevar a cabo en el hospital de referencia en Andalucía, ubicado en Córdoba. Se da la circunstancia de que las probabilidades de éxito en uno y otro centro hospitalario van desde el 98% en Estados Unidos al 50% en Córdoba, especialmente en la fase de post operatorio en la que pueden surgir complicaciones que dejen al paciente con secuelas. Por tal motivo Sonia Reyes exige a la Junta que, en el caso de que la operación se lleve a cabo en Córdoba, se les entregue una carta de garantía de un resultado exitoso. De no ser así, los padres de Cristian tienen previsto agotar todo el tiempo que sea posible, hasta marzo o abril según los médicos para que su vida no corra peligro, con el fin de que tanto la administración autonómica como la Central, de la que aún no han obtenido respuesta, accedan a sufragar los gastos para que Cristian tenga derecho a crecer como un niño normal.