La doctora Anglada y el doctor Manuel Huerta despejan las dudas sobre tratamientos que exijen una alta especialización
Muchas son las dudas y los miedos que nos asaltan cuando de someternos a tratamientos odontológicos se trata.
Miedos y dudas íntimamente ligadas al desconocimiento de los mismos o, lo que es peor, a una mala información.
Circunstancia a la que no escapan la implantología y la periodoncia, cuyos ‘secretos’ y verdades puntualizamos de la mano de Manuel Huerta, especialista en periodoncia y cirugía, y la doctora Ana Anglada, especialista en ortodoncia y estética, del Centro de Odontología Avanzada A Sonreír.
¿Han avanzado mucho en los últimos años la periodoncia, ortodoncia y endodoncia?
Sin duda. Aunque el campo de la implantología dental ha progresado muchísimo, también lo han hecho la periodoncia, ortodoncia y endodoncia.
Cabe señalar que la peridoncia es la especialidad que se encarga de la prevención y tratamiento de los tejidos que soportan al diente.
La salud de la encía, el hueso que rodea al diente y el ligamento son clave para conservar nuestros propios dientes, que es lo verdaderamente importante.
La posición en la que se encuentran los dientes también es clave para conservarlos, así como que un buen equipo dental trabaje de forma conjunta la peridoncia, la ortodoncia e incluso la endodoncia en muchos casos extremos.
Todos los especialistas unidos con la única finalidad de conseguir un tratamiento donde el paciente conserve al máximo sus propios dientes.
¿El implante es la mejor solución ante la trágica pérdida de un diente?
Cierto es que una vez que ya se han perdido piezas y no hay vuelta atrás, la mejor solución a día de hoy es remplazarlo por un implante de titanio.
Si la seguridad social cubriera la odontología de una forma digna, no habría duda ante qué tratamiento es el mejor y más conveniente para el paciente.
Muy lejos quedan las otras opciones como los puentes, donde necesitamos tallar dientes sanos, o las incómodas prótesis de quita y pon , que usaban los padres de nuestros padres.
¿Precisan del mismo cuidado o mayor que un diente?
Los implantes sufren como los dientes y tienen una peor solución ante infecciones.
Por este motivo los cuidados deben ser extremos en higiene y control ante fuerzas extremas de masticación o apretamiento, como ocurre en pacientes con bruxismo.
debemos insistir en que hay que ser muy cuidadosos con nuestros dientes porque son un tesoro
¿Los implantes son para toda la vida?
Para toda la vida existe “el amor de madre” y, desgraciadamente, a veces ni eso. Que no nos engañen, los implantes, al igual que nuestros propios dientes, sufrirán cambios con el paso de los años, y no precisamente a mejor.
Por ello debemos insistir en que hay que ser muy cuidadosos con nuestros dientes porque son un tesoro. Lo mismo ocurre con las coronas, puentes o protesis sobre implantes.
¿La higiene es más complicada cuando tenemos implantes?
Debemos tener en cuenta que cuando necesitamos un implante antes hemos perdido un diente y por lo tanto el volumen de hueso y encía se ha reducido.
Aunque en la intervención se añada hueso y encía, y el implante se coloque de forma muy cuidadosa, lo más común es que queden algunas zonas entre implante y diente, de ahí que el uso del hilo dental y del cepillo interproximal o irrigador sea necesario y crítico para una higiene correcta.
¿El hilo dental no daña las encías?
Una buena técnica para pasar el hilo dental es fundamental para conseguir limpiar zonas donde ni cepillo, ni enjuague bucal ni irrigador llegan. Debemos pasarnos el hilo a menudo.
¿Cuándo la encía se retrae y el diente se hace muy largo se trata con un injerto y listo?
Sobre este tema también hay que ser muy cuidadosos, ya que antes de colocar un injerto de encía debemos localizar la causa del problema , eliminarla, para que entonces nuestro tratamiento tenga éxito a largo plazo.
Los motivos pueden ser muchos y por ello sólo un buen profesional, con experiencia y formación, sabe realizar estos tratamientos.