Una vez salvada la oleada de convocatorias electorales, las aguas parecen volver de nuevo a su cauce. Normalidad que aquí, en Chiclana, viene marcada por la constitución del nuevo equipo de gobierno municipal, el reparto de las delegaciones municipales y, hace apenas unas horas, la aprobación de las retribuciones que recibirán los miembros del equipo de gobierno, los representantes de la oposición, los auxiliares de los distintos grupos municipales y el personal eventual.
Retribuciones a las que serán ajenos el alcalde, José María Román. y la edil socialista Cándida Verdier y que, indirectamente, vienen a poner de relieve la mayor representatividad de Chiclana, de sus representantes, en otras instituciones, caso de la Diputación de Cádiz y el Senado.
Concretamente, José María Román se ha convertido en vicepresidente primero de la institución provincial, ocupando responsabilidades en áreas tan destacadas e importantes para la localidad como Turismo; además de asummir la Coordinación y Desarrollo Estratégico, Productivo y Social.
Por su parte, como es sabido, Cándida Verdier está presente en el Senado.
Pero, además de la normalidad política, la localidad ha entrado de lleno esta semana en su temporada grande, esa que tiene al turismo como gran protagonista y que tiene como apreciados efectos colaterales la generación de riqueza y empleo.
Una entrada que se ha y se va a producir a lo grande, ya que a las buenas expectativas se une este sábado la puesta de largo de la segunda edición del Concert Music Festival, ya consolidado como la gran cita musical del verano en España.
Dicho lo cual, ahora solo falta esperar que esta vuelta a la normalidad se traduzca en más y mejor generación de empleo y progreso para la localidad.
Artículo de Juan Manuel Reina.
