La pandemia ha obligado a suspender todas las actividades previstas de una fiesta que aspira a volver el próximo año con más fuerza para sembrar de nuevo de papelillos y alegría las calles de Chiclana
Esta debería haber sido la semana carnavalesca de Chiclana. Sin embargo, la Delegación Municipal de Fiestas y las asociaciones vinculadas al carnaval se han visto obligados a posponer todas las actividades hasta el próximo año, en la confianza de que para entonces Chiclana vuelva a recuperar la añorada vieja normalidad.Un aplazamiento obligado por las actuales circunstancias sanitarias que hacen imposible llevar a cabo eventos multitudinarios en los que no se puede garantizar el poder guardar la normas de seguridad de la pandemia durante su desarrollo. Porque el carnaval, y en Chiclana más, se vive y se disfruta sobre todo en la calle, con los coros, la Cabalgata, con la gente.
Compartiendo alegría, ganas de pasarlo bien y de disfrutar de una ciudad que tiene en esta fiesta una de sus mayores manifestaciones de una forma de ser. Con estas fotografías de Pedro Leal, queremos recordar desde estas páginas de El Periódico de Chiclana una fiesta que es posible gracias a muchas personas que trabajan durante todo el año por conseguir que, cada año, el carnaval de Chiclana sea mejor, más potente,más reconocido. Unas personas que desde ya, están preparando su regreso en 2022, con una fiesta que volverá, si las circunstancias lo permiten, a sembrar de papelillos, cantos, bromas y alegrías las calles de Chiclana.