María Isabel Verdugo, Hermana Mayor de la Hermandad del Huerto: «Después de muchos problemas y de un intenso y apasionado trabajo, aguardamos con gran ilusión el reencuentro con la Semana Santa de Chiclana».
Después de la sentida ausencia del pasado año, la Hermandad de Nuestro Padre Jesús de la Paz en su Sagrada Oración en el Huerto y María Santísima de las Angustias vuelve a procesionar por las calles de Chiclana de la Frontera. Un momento que, en gran medida, vendrá a recompensar el gran trabajo realizado por todas y cada una de las personas que la integran y de forma muy especial por su Hermana Mayor, María Isabel Verdugo Fernández, una de las pocas mujeres que tiene la gran responsabilidad de encabezar una hermandad en Chiclana.
– ¿Qué se siente cuando el momento por el que tanto habéis trabajado y con el que tanto habéis soñado está tan cerca?
-La verdad es que sentimos mucha emoción. Como todo el mundo sabe, hemos vivido momentos muy delicados que, incluso, han hecho peligrar nuestra continuidad.
Por tanto, creo que no hay mejor recompensa que, tras un lastimoso año de ausencia, volver a procesionar por las calles de Chiclana de la Frontera.
-¿Ha sido muy complicado llegar hasta aquí?
-Sí, mucho más de lo que se pueda pensar.
Hay que tener en cuenta que nos hicimos cargo de la hermandad en una situación muy complicada, intervenida y en grave riesgo de no volver a procesionar.
Aunque yo nunca había participado de la vida cofrade, como cristiana me sentí obligada a dar un paso. Fue una decisión necesaria y, afortunadamente, en ese camino encontré a un gran número de personas que también quisieron tomar parte en esta aventura de devoción.
«Lo importante no es ser hombre o mujer; a todos nos une el sentimiento y las ganas de trabajar»
No obstante, desde que nos hicimos cargo de la hermandad hasta aquí las cosas no han sido fáciles, incluso hubo quienes dudaron de que pudiésemos llegar a tiempo a la Semana Santa, pero, como el chiclanero ya sabe, aquí estamos, tremendamente ilusionados e ilusionadas con volver a procesionar en nuestra Semana Santa.
-Además de usted, otras ocho mujeres conforman el grueso de la junta de gobierno, la más femenina de Chiclana de la Frontera sin lugar a dudas, ¿a qué se debe?
-Bueno, cuando decidí dar el paso adelante contacté con las personas de mi entorno para formar equipo y, claro está, la gran mayoría son mujeres.
Afortunadamente, encontré una gran respuesta por parte de ellas y eso hizo que las mujeres fuésemos mayoría en una junta en la que contamos con tres hombres. No fue premeditado, surgió de forma totalmente natural.
«el respaldo y la respuesta de los vecinos de la banda ha sido fundamental para llegar aquí»
-¿Ha supuesto este hecho algún inconveniente en un escenario ‘dominado’ por los hombres?
-No, para nada. Desde el primer minuto nadie ha reparado en si éramos más mujeres que hombres. Todos lo hemos asumido con la lógica naturalidad y, fruto de ello, hemos trabajo juntos para lograr llegar a este punto tan importante.
Es cierto que desde tiempos pasados los hombres han sido los grandes protagonistas de este mundo, tan solo hay que echar un vistazo a las hermandades, a las de Chiclana y a las del resto de localidades. Pero, como ha ocurrido en nuestra hermandad, las mujeres hemos demostrado ser igual de capaces y, lo que es más importante, igual de devotas para estar al frente.
Creo que en la Semana Santa, como en tantos otros ámbitos de la vida, se demuestra que no hay diferencias entre mujeres y hombres y que lo verdaderamente importante es que compartamos esfuerzos, ilusiones e ideas por aquello que nos ocupa y preocupa.
-De hecho, esta presencia tan importante de mujeres les ha llevado a contar con un importante taller de costura.
Así es. Contamos con un gran taller de costura, formado por mujeres que tienen una gran maestría y que nos está permitiendo renovar túnicas, etc.
Un trabajo que se complementa con el que hacen los hombres y que, por ejemplo, se han antojado fundamental para los triduos. Todos somos uno.
Además, quiero resaltar la gran ilusión y el trabajo que está realizando el grupo joven de la hermandad.
-¿Cómo han respondido los vecinos de la Banda a sus esfuerzos?
-La verdad es que hemos tenido una respuesta y un acompañamiento fundamental, sin el que no hubiese sido posible llegar hasta aquí.
Una entrega que, además, nos da fuerza de cara al futuro, ya que hay un compromiso claro de que la hermandad siga adelante y mejorando cada día más.
-Por último, ¿qué opinión le merece la Semana Santa de Chiclana?
-Yo creo que desde hace años se vienen dando pasos importantes por todos los actores que la conforman. Un trabajo que ha servido para que la Semana Santa chiclanera crezca y, como se está viendo, cada día despierte más el interés y la pasión de los chiclaneros, pero también de otras muchas personas de municipios vecinos.
Creo que vamos por el buen camino y que hay que seguir trabjando con la misma pasión y entrega que se viene haciendo.